A principios de la década de 1970, la sequía y la recesión provocaron que muchas piscinas de Santa Mónica (California) se quedaran vacías. Una piscina sin agua no parece muy útil no?, pues un grupo de chavales del barrio se dieron cuenta para qué sí les podría ser de utilidad estas piscinas secas, comenzaron a patinar dentro de ellas deslizándose a toda velocidad arriba y abajo por las paredes curvas y fondos, el grupo se llamó «Z-BOYS».
Ellos no competían para depurar una técnica secreta que no pudiera copiarse, su filosofía se basó siempre en el desarrollo de nuevos estilos y trucos al aire libre, consiguiendo además que otros «skaters» respondieran a este movimiento que nació en aquellos años.., grindando por los bordes de las piscinas consiguieron, además de mucha suela de zapatilla desgastada, que surgieran los primeros downhill.
Recuperamos este movimiento hoy, esperando que las nuevas generaciones consigan mantener vivo el espíritu y filosofía donde se fraguó el arte de patinar, aquellos chicos también se enfrentaron a la prohibición por parte de autoridades para skatear libremente en su ciudad. De igual manera hoy, en muchas ciudades seguimos con esta misma prohibición gracias a nuestros políticos, que bien se jactan después de la organización, por ejemplo, de los «Barcelona Extreme Sports» por ejemplo, eventos que se basan en potenciar los “deportes urbanos”, incoherencias basadas en márgenes económicos…..
“Porque el Skate no desaparezca nunca de nuestras calles!!!”
